Resumen
Si hay un texto que me haya impresionado siempre en la historia de la literatura escrita en castellano es sin duda un poema sin nombre de autor, un poema anónimo (¿qué importa el nombre propio en este caso?). En el siglo XVI-XVII se podÃa escribir asÃ: “No me mueve mi Dios para quererte / el cielo que me tienes prometidoâ€. Esto ya de por sà es básico. Lo que mueve al amor es el amor del Cristo crucificado y bajado a la Tierra para salvarnos. El “homo viatorâ€. Pero en verdad lo que impresiona no es eso. Lo que impresiona es exactamente la ausencia del daño, aunque se sea consciente del daño
Palabras clave
Freud; lectura; crÃtica literaria; teorÃa de la literatura